A ti que quieres cambiar, pero nunca te atreves…
A ti que no te gusta tu vida actual, pero sigues auto convenciéndote con el: “es lo que hay”, “ya pasará”, “se puede estar peor” …
A ti que tienes miedo a hacer esas cosas que sabes que te harían feliz solo imaginándolas…
¡Para todos vosotros está dedicado este post!
Últimamente no dejamos de escuchar en todos los ámbitos de nuestra vida (profesional, sentimental, espiritual…) la tan de moda “zona de confort”. Pero realmente ¿qué es la dichosa zona de confort?
La zona de confort es ese lugar mental en el que pase lo que pase, nos conformamos con todo lo que nos va sucediendo, y no pensamos en cambiar nada de nuestras vidas. Pero estar a gusto con todo o conformarse, no necesariamente significa que sea bueno.
Algunas personas están simplemente “a gusto”: con la apatía, con una pareja con la que ya no disfrutan, con un cuerpo que no son capaces de observar en el espejo, con un trabajo que aborrecen, con el sentimiento de fracaso permanente … En líneas generales podríamos decir que son aquellos que ven la vida pasar desde la ventanilla de un tren en el que no saben ni ¿por qué? Ni ¿para qué? Se montaron… y lo peor… es que ni siquiera eligen el destino al que les lleva. Pero ese tren les proporciona la “tranquilidad de solo viajar en círculos” sin trazar rutas nuevas siempre con el mismo principio y el mismo final.
El problema de la zona de confort que tenemos como personas, es que nunca nos podemos liberar de ella, pues como mucho lo que conseguimos que es hacerla más grande o ampliarla cuando realizamos pequeños cambios, pero son cambios sin apenas relevancia.
Nuestra zona de confort es aquella en la que las cosas nos resultan conocidas y cómodas, donde estamos acostumbrados a vivir. Esta zona depende de muchos factores, entre ellos destacan tus hábitos, tus rutinas, tus conocimientos, tus habilidades, tus actitudes y tus comportamientos. Es todo aquello conocido para ti y a lo que estás acostumbrado.
Estar acostumbrado a estar triste, infeliz, inseguro, enfadado…es lo que puede convertir nuestra zona de confort en una inmensa piscina de fango donde no estamos a gusto… pero es a lo que estamos acostumbrados. Y no es otra cosa que el MIEDO a lo que puede haber fuera de esa piscina, lo que nos paraliza a permanecer ahí, nadando entre esas estancadas y malolientes aguas.
¿Y QUE HAY AL OTRO LADO DE LA ZONA DE CONFORT?
La mayoría de los expertos lo llaman la Zona de Aprendizaje: es aquella en la que te atreves a salir y a experimentar nuevas cosas como: aprender idiomas, viajar conociendo culturas nuevas, cambiar de hábitos ( comer de manera distinta, practicar deporte, bailar …); en general esta zona de aprendizaje ha sido visitada prácticamente por todo el mundo, el problema está en que en ocasiones dada la dificultad de cambiar de acciones, y mantenerlas en el tiempo, las personas tienden a volver a la zona de confort porque es la que más conocen.. y repito… a pesar de los pesares, donde más “a gusto” se encuentran… porque ¿a quién le gusta cambiar?
¿Y qué te puedes encontrar si continúas experimentando más allá de la zona de aprendizaje, y asumes que los cambios no siempre tienen por qué ser malos?...
Pues más allá se encuentra la ZONA DE PÁNICO O LA ZONA DE LA MAGIA…todo dependerá de ti, porque alcanzar tus objetivos y metas solo está en tu mano.
¿Cuántas veces has pensado o te han dicho, “y si te sale mal”? Pues ésta es esa zona de pánico: esa zona desconocida donde la gente no entra por miedo al fracaso o al qué dirán. ¿cómo vas a cambiar de trabajo según están las cosas? ¿cómo vas a emprender con la crisis que hay? ¿para qué vas a volver a ponerte a dieta si siempre has fracasado? ¿cómo voy a cambiar de pareja con mi edad? ...
Los más visionarios, optimistas y aquellos que han conseguido alcanzar el éxito y sus sueños llaman a ésta la zona mágica, la cual desconoces porque todavía no has estado allí. Ésta es la zona en la que te pueden ocurrir cosas increíbles. Puede ocurrir todo aquello que siempre quisiste pero que nunca te atreviste ni a intentar.
Hoy te escribo desde la zona de la magia, donde cada día experimento nuevas emociones, donde cada día aprendo cosas nuevas, donde me atrevo a soñar…
Ya bastante tiempo permanecí en la inconfortable zona de confort…
Y tu… ¿te atreves a soñar?
Virginia Martínez, Ingeniera Agrónoma por la Universidad de LEÓN, con un Master de Dietética y Nutrición avanzada por la Universidad Internacional de la Rioja, Experto en Coaching Nutricional por la Universidad ISABEL I. También dispongo de formación en Personal TRAINER, MINDFULNESS e Inteligencia emocional. Además de una amplia formación como técnico nutricionista y dietista, he vivido mi propio proceso de transformación. He cambiado mis hábitos alimenticios, controlado la ansiedad y el “hambre emocional” (que me ha acompañado siempre) y gracias a una dieta personalizada, deporte y técnicas de desarrollo personal (coaching) he conseguido bajar más de 50 kilos y mantenerlos en el tiempo. Mi lema siempre ha sido: ¡si yo puede cualquiera puede! a veces solo hay que dejarse guiar. En la comida se reflejan muchas frustraciones y complejos internos. Un coach nutricional debe infundir fe en sí mismo y en sus capacidades a las personas, ahí radica su singularidad y su éxito. MI misión fundamental es ayudarte en la adquisición de hábitos alimenticios saludables, pérdida de peso (sólo si fuera necesaria) y desarrollo de la AUTOESTIMA.