Generar Confianza y mantenerla

La confianza es el pilar sobre el que se construyen las relaciones entre personas. Como bien sabes, sin confianza no hay ventas, y sin ventas no hay negocio.

La confianza no sólo es importante en los negocios, sino que su relevancia va mucho más allá, pues afecta a nuestro día a día.

Nuestro éxito personal depende directamente de la confianza que otros nos tengan.

Vivimos en sociedad y dependemos de otras personas para conseguir nuestros fines y para sentirnos satisfechos con nuestra vida. La confianza puede tardar años en ganarse y un solo momento en perderse. Y una vez perdida recuperarla puede resultar  un asunto muy complicado.

El poder gozar de la confianza del prójimo pone a tu alcance un mundo de oportunidades. Dejas de ser un extraño. Su puerta está abierta para ti. Ahora formas parte de su círculo de confianza.  ¡Si puede hacer algo por ti lo hará!

Ahora vemos cómo generar confianza y cómo mantenerla.

Todas las personas estamos siendo continuamente evaluadas y clasificadas por los demás. Lo que hacemos y decimos es examinado y conduce a una clasificación, la cual se va reajustando con cada nueva información sobre nosotros que recibe la persona, tanto provenga de nosotros mismos o de otros.

Somos evaluados por lo que hacemos, decimos, como lo hacemos y decimos y por nuestra imagen. ¡Todo ello habla de nosotros!

La clasificación se divide en dos categorías, personas de confianza y de no confianza. Para ser catalogado como alguien de confianza es necesario que haya coherencia entre todos los mensajes que mandamos.

Es decir lo que haces,  lo que dices,  cómo lo haces y dices y tu imagen debe ser coherente, deben transmitir mensajes congruentes los unos con los otros dando lugar a un gran mensaje unitario.

Sin coherencia, no se da confianza. Si la persona percibe desarmonía entre los mensajes asumiendo que existe falta de verdad, de autenticidad, en otras palabras, siente que se le está engañando.

Por lo tanto, si quieres ser catalogado como persona de confianza, más te vale que los mensajes que manifiestas al exterior sean coherentes. Hazlo así y serás visto como alguien auténtico, que dice la verdad y, por lo tanto, digno de confianza.