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La Economía de los Valores

12-06-2018
La Economía de los Valores

Es necesario conocer los valores de la persona que decide iniciar un proceso de organización de sus finanzas, tomar consciencia de las mismas, optimizarlas y disfrutarlas.

Los valores son aquello con lo que uno se siente feliz, satisfecho, tranquilo de haber obrado en conciencia. Estos valores son las reglas del juego para tomar acción, las cosas que dan sentido a los objetivos y hacen que se disfrute del camino, son la energía que hay detrás de nuestras metas.

La libertad, integridad, comunicación, familia, autoestima, justicia, seguridad, medio ambiente, orden, alegría, diversión, éxito, son ejemplos de valores.

Todos ellos son conceptos mentales relativos a cada persona, que una vez puestos en acción se hacen sólidos y conforman la personalidad de cada uno.

Los valores son neutros, ni buenos ni malos, lo que hace que un valor lo vivamos de forma positiva o negativa son las creencias que cada uno encierra dentro de esa palabra. Por ejemplo, el éxito, no significará lo mismo para una persona que para otra, dependerá de las creencias que tenga cada uno sobre lo que considera “éxito”.

Cuando dedicamos nuestro tiempo, energía, dinero a algo que va en contra de nuestros valores, nos sentimos frustrados, irritadas, angustiados, y con el tiempo genera estrés.

En el post anterior hablamos de inteligencia financiera y ahora sabemos que son los valores, entonces, ¿cómo se relacionan ambos para conseguir tomar la mejor decisión económica para cada persona? Lo ilustraré con un ejemplo:

En un momento dado, una persona necesita pedir un préstamo para algo realmente necesario y se plantea la opción de pedirlo a un banco a un  7% de interés, o una segunda posibilidad, pedirlo prestado a un familiar que no le cobrará intereses y tampoco establecerá un periodo de devolución. Sin duda, la opción  más ventajosa económicamente es pedir el préstamo al familiar a un 0% de interés. Sin embargo, para esta persona las relaciones familiares y la tranquilidad son valores fundamentales y antes de poner en peligro la buena relación con este familiar por algún posible contratiempo o malentendido a causa del dinero, así como para evitar la tensión, presión  e intranquilidad que le puede causar el intentar devolver ese préstamo cuanto antes, prefiere pedirlo al banco al 7% de interés. En este caso prevalecen sus valores fundamentales por encima del interés financiero.

Por tanto, no siempre la decisión más ventajosa económicamente es la mejor decisión para la persona si va en contra de sus valores, puesto que a pesar de ser financieramente la mejor opción, no hará que se sienta bien, feliz, tranquilo.

De ahí que es tan importante que en el proceso de poner en orden a las finanzas personales, optimizar los recursos y encontrar las mejores decisiones financieras, la persona tenga presente sus valores, para trabajar en armonía con ellos y conseguir el objetivo, que no es otro sino que sienta que su economía es una “economía feliz”.

Beatriz Calvo en CoachYa
Autor/a del post

Beatriz Calvo

Financiera